lunes, 12 de noviembre de 2007

Robots de cine

El hombre bicentenario:

El cuento narra la historia de un robot que quería ser humano, tener expresiones, comer, dormir, sentir, el deseaba en realidad ser un hombre. Dando de este modo un espiritu de conciencia al expectador, para que este comience a vivir su vida.
Esta trama también inspiró a Stanley Kubrick, el guionista de la película A.I. (Inteligencia Artificial), y a su director, Steven Spielberg, en la cual el protagonista, un nuevo prototipo de niño robot, capaz de desarrollar sentimientos, quiere convertirse en un humano de verdad.







Yo, Robot


Yo, robot, de Isaac Asimov, es un volumen publicado en 1950 en el que se recogen una serie de relatos enlazados por la temática y el hilo argumental.

Contenido

En este libro se establecen las tres leyes de la robótica que son un compendio fijo e imprescindible de moral aplicable a supuestos robots cuasi-inteligentes. Los relatos plantean diferentes situaciones a las que tendrán que enfrentarse distintos especialistas en robótica y en las que se plantean paradojas e ingeniosos ejercicios intelectuales que indagan sobre la situación del hombre actual en el universo tecnológico. La protagonista de varios de los cuentos es Susan Calvin, experta en Robopsicología.
Algunas de las ideas de las historias sirvieron de inspiración al conjunto musical Alan Parsons Project para la grabación de un disco conceptual, I robot, en 1977.
De igual modo se inspiró una película de 2004 con el mismo nombre, Yo, Robot dirigida por Alex Proyas y protagonizada por el actor Will Smith.
Cabe señalar que la película Yo robot se inspira sólo lejanamente en la obra de Asimov, de la que se han tomado principalmente las tres leyes de la robótica:
1º: Un robot no puede hacer daño a un ser humano o, por inacción, permitir que un ser humano sufra daño.
2º: Un robot debe obedecer las órdenes dadas por los seres humanos, excepto si estas órdenes entrasen en conflicto con la Primera Ley.
3º: Un robot debe proteger su propia existencia en la medida en que esta protección no entre en conflicto con la Primera o la Segunda Ley.
(Aparentemente, la primera ley es violada durante el transcurso de la película, en cuanto al caos urbano donde se ven a robots dañando humanos, pero esto puede explicarse, primeramente, por el control ejercido por el megacomputador de Robots y Hombres Mecánicos, y por una aplicación de la ley cero, aun cuando esta nunca es mencionada y, tomando obviamente lo escrito por Asimov como Vox Dei, un uso incorrecto de ésta, puesto que esta última hace su aparición muchísimo tiempo después).






C-3PO

C-3PO (pronunciado: SITRIPIO) es un personaje ficticio del universo de la Guerra de las Galaxias. Aparece en los seis episodios de la saga. El actor que lo interpreta es Anthony Daniels.
Se trata de un droide de protocolo, es decir, un droide diseñado específicamente para interactuar con seres pensantes . Puede hablar y entender más de seis millones de formas de comunicación . Construido por Anakin Skywalker, y compañero del droide astromecánico R2-D2.

Su principal función como droide de protocolo es ayudar a explicar las costumbres, de otras culturas, la traducción, etc. Es muy leal a sus amos, desde su creación, ha servido a más de cuarenta.
En 2004, C-3PO fue introducido dentro del salón de la fama de los robots.
Anteriorimente era llamado 3PO pero tras su "reinicio" se le llamaba C-3PO.






R2-D2


R2-D2 es un personaje de ficción del universo de la Guerra de las Galaxias. Se trata de droide astromecánico contraparte y amigo de C-3PO. En algunas partes, sobre todo en países hispanoamericanos, se le conoce como "Arturito", debido al anglicismo fonético del nombre.
R2-D2 ha sido interpretado por Kenny Baker en los seis episodios de la saga. R2-D2 fue incluido en el "Hall of Fame" de los robots en el 2003.



1 comentario:

Leónidas Kowalski de Arimatea dijo...

Hola.

La novela breve "El Hombre del Bicentenario" me encantó cuando la leí hace unos quince años, y precisamente ayer se la presté a un amigo. Qué casualidad que ahora me encuentre con tu blog.

Saludos desde La Isla.